viernes, 25 de octubre de 2019

15.- Fer

Hola amigos: Ya estamos de regreso con nuestras aventuras, hemos tenido intensas actividades que les queremos contar, esperamos no volver a perder la regularidad de nuestros relatos.












Fabi llevaba una coleta simple y apenas algo de maquillaje al levantarse en la mañana. Aún así era todo un espectáculo digno de verse.
A pesar de haber superado los cuarenta no se le notaban los estragos del tiempo, ni en el rostro ni en el cuerpo. Era una fan del ejercicio y entrenaba su cuerpo diariamente durante dos horas. Su trasero era redondo y firme como de granito y con la textura del terciopelo, sus muslos redondeados y con la firmeza del mármol, sus piernas pequeñas y suaves, y en su curvada cadera se derrapaba el deseo.


El llevar una dieta equilibrada, y beber mucha agua le permitía tener la piel tersa y suave como la seda. Pero las curvas que más hacían enloquecer a los hombres de cualquier edad que se cruzaban con ella eran sus magníficos senos, que además de naturales, eran grandes y turgentes, esféricos y erectos a pesar de ser enormes, destacando en su figura como dos volcanes en una cordillera.

Alex, el cual es un buen mozo de cuarenta y seis años; de cuerpo atlético, que mantiene corriendo ocho kilómetros diarios y con la práctica de artes marciales.

Parecían una pareja normal pero no lo eran, compartían un secreto. Ella tenía sexo con cualquier hombre que tuviera a disposición y a Alex le encantaba la idea de que ella lo hiciera, siempre y cuando le relatara todo con detalles; la forma en que la penetraban, la cantidad de veces que se lo metían y el tamaño de los instrumentos de sus amantes.

Aunque para algunas personas podrían parecer pervertidos en realidad ellos así eran felices. Eran una pareja liberal y veían el sexo como diversión.



A veces Fabi se aburría por no tener algún macho con quien pasar el rato y tenía que pensar en la manera de conseguir a alguien para poderse satisfacer. Intentó con algunos de sus anteriores amantes pero los que le contestaban no podían debido al trabajo o estaban de viaje. Y faltaban algunos días para comenzar las actividades en el club. Entonces, se encontraba desesperada. Decidió que saldría a la calle a comprar jugo y pan integral a ver si así se calmaba un poco.
Al estar formada en la fila de la caja para pagar notó a un joven de impresionante estatura que se formó detrás de ella. Fingiendo revisar su celular aprovechó para darle una mirada mientras él inspeccionaba la parte alta del anaquel, aparentemente buscando pastillas para el aliento. Le pareció bastante guapo y lo suficientemente varonil para despertar su deseo, ahora solo era cuestión de llamar su atención. Fabi dejó caer su celular a los pies del chico, que inmediatamente se agachó para recogerlo y entregárselo, ella fingiendo torpeza lo volvió a dejar caer y ya con la atención del chico aprovecho para mostrarle el gran espectáculo de su pechos bamboleando al agacharse. Al levantarse notó con emoción que el chico estaba ruborizado y se veía muy atento a ella.
Fabi le agradeció por devolverle su teléfono, y le dijo que era muy caballeroso además de guapo. Nuevamente se ruborizó el joven que ya no sabía como ocultar su estupor. Mientras le cobraban la mercancía, Fabi y el joven que dijo llamarse Fer continuaron charlando muy animados.

Al salir del super, Fabi aprovechó para preguntarle si sabía como llegar a un cruce que ella sabía que estaba a unas calles, él le dijo que claro que sabía como llegar, que si deseaba hasta podía no solo acompañarla; sino incluso llevarla si se lo permitía. Fabi le dijo que le parecía una muy buena idea y se encaminaron juntos al auto de Fer. Al acercarse al cruce Fabi se preguntaba como podría ver si lo convencía de ir a su casa, cuando él le preguntó si no le gustaría tomar alguna bebida fresca, ella le dijo que definitivamente se le antojaba algo fresco ya que aunque era temprano la temperatura en primavera era suficiente como para beber lo que fuera.
El chico se encaminó unas calles más y entró en el estacionamiento de un edificio, detuvo el auto y ambos descendieron, le dijo que él vivía en el primer piso y solo había dos departamentos en cada piso.


Fabi subió por delante sabiendo que él no quitaría la vista de las piernas o incluso quizás alcanzara a mirar por debajo de su falda. Cuando llegaron a la puerta del departamento él se apresuró a abrir y la invitó a pasar. Su departamento era amplio y se veía cómodo. Se veía además ordenado, Fabi se preguntó si quizás Fer viviría con alguien, quizás con pareja. Pero decidió no preguntar, a ella le daba lo mismo y quizás estropearía el momento. Fer le preguntó si deseaba un poco de vino blanco muy frío. A Fabi le encantó la idea. Mientras él servía el vino, Fabi se sentó en un sillón de color café de dos plazas, cruzó la pierna y sin proponérselo se veía terriblemente seductora.
Fer se acercó con las bebidas y se sentó junto a Fabi, le alargó el vaso de vino que ella tomó y brindaron por haberse conocido.
Fer le contó que era diseñador y trabajaba por su cuenta para clientes y empresas, no le iba nada mal y podía pagar ese departamento para el solo. Fabi pensó que era una buena noticia que viviera solo, y estaba dispuesta a aprovechar. Ella le dijo que necesitaba pasar al baño y Fer le indico la puerta de su izquierda, al levantarse Fabi recargó su mano como sin querer sobre la pierna de Fer, sintiendo su crispación durante un segundo, se levantó y caminó hacia el baño. A medio camino volvió a dejar caer su celular y se inclinó hacia delante para recogerlo, segura de que Fer estaba disfrutando el espectáculo de su trasero que quedaría a la vista ya que su falda era bastante corta.



Al regresar del baño y volver a sentarse junto a Fer, nuevamente puso su mano de manera aparentemente accidental sobre él, pero ahora se deslizó un poco más allá, llegando a rozar su entrepierna y notando que aunque lucía bastante azorado, ya tenía una evidente erección y por lo que se notaba a través de su pantalón de delgado casimir estaba bastante bien dotado. Ya sin tapujos su mano se dirigió hacía ese paquete y lo acarició lentamente, palpándolo a través de la tela. Fer cerró los ojos al sentir ese contacto, gimiendo suavemente. Sin abrir los ojos alargó el brazo y rodeando el talle de Fabi la atrajo hacía si de manera dulce. La besó primero muy levemente, después fue haciendo más intenso el contacto de sus labios y los de ella mientras sus manos exploraban bajo su falda y bajo su suéter. Fabi desabrochó el pantalón de él buscando sacar su instrumento, pero él le dijo que mejor fueran a la habitación para estar más cómodos. Fabi aunque con respiración agitada aceptó encantada, se levantaron y caminaron hacia el cuarto donde se encontraba una cama grande con una colcha de colores naranja y café. Al entrar Fer la abrazó por la espalda y acariciándola y besando su cuello la despojó del suéter y la falda, los cuales quedaron en el piso de la habitación, Fabi ronroneaba de placer mientras Fer acariciaba su cuerpo por toda su superficie, entreteniéndose en sus preciosos senos y sus portentosas nalgas. Ella conservaba su sostén, tanga,medias con liguero y sus tacones, el cual era un combinado que ella se puso pensando en terminar así precisamente. Fer la empujó sobre la cama quedando ella en cuatro esperando que el macho iniciara su trabajo.

Él desabrochó su camisa y se acercó a ella, palpando la rotundidad de esas hermosas nalgas y acercando su boca para besarlas e inhalando el aroma que de ellas emanaba.




Ella esperaba que la siguiera despojando de la ropa por lo que le extrañó sentir que se retiraba, de repente la asustó un poco el estallido luminoso de un flash, aparentemente él le había tomado una fotografía. Realmente ella no tenía ningún inconveniente pero le hubiera gustado que le preguntara primero. Volvió a notar el flash varias veces. Y al sentir que se estaba aburriendo, se acostó boca abajo en la cama esperando a que su galán se decidiera a entrar en acción.


Fer siguió contemplándola y tomando fotografías mientras Fabi casi se retorcía de ganas de que la follara de una vez. Le preguntó que cuánto más iba a esperar y Fer con una sonrisa traviesa le dijo que debía esperar un poco, que no fuera impaciente.



Fabi no tenía idea de cuál era el plan de Fer pero ya se estaba aburriendo, estaba a punto de levantarse e ir por él, cuando se escuchó que la puerta de entrada se abría y entraba gente al departamento, ella se asustó y pensó que Fer cerraría la puerta, pero Fer no se movió.

Entraron a la habitación cinco chicos que la devoraron con la mirada, Fabi entonces se asustó de veras y trató de levantarse por su ropa, pero ellos fueron muy rápidos y entre todos la pescaron y la regresaron a la cama. Fer les indicó de manera imperativa que no la fueran a lastimar ni la agarraran con brusquedad para no dejarle ninguna marca. Ellos aparentemente eran sus subordinados porque solo asintieron dócilmente. Entre los cinco detenían sus brazos y piernas y la despojaron de su tanga la cual pasaron de uno al otro para olerla antes de que Fer la guardara en un cajón. Fabi estaba aterrada aunque ya antes la habían obligado a tener sexo entre varios, siempre había sido en condiciones calculadas, era la primera vez que realmente la iban a violar. Eso generó emociones encontradas en ella, por un lado se dio cuenta que estaba muy húmeda su entrepierna, y por otro sentía realmente miedo.
Fer se acercó y le dijo que ella estaba demasiado buena como para comérsela solo, por lo que llamó a sus amigos ya que ellos siempre compartían todo. Le dijo que no importaba si gritaba ya que los vecinos no se encontraban en casa y sus gritos no podrían llegar a la calle ya que estaba del otro lado del departamento y alejada por los jardines. Entonces la iban a follar todas las veces que quisieran hasta que se cansaran los seis, que era mejor que se resignara.



Al escuchar eso, Fabi sintió una enorme excitación pero decidió mantenerla lo más oculta posible, alguna vez escuchó que lo que excita a un violador es la resistencia de su víctima, y si se daban cuenta de que ella los deseaba quizás se asustaran o ya no pudieran violarla.





Fer se acercó a ella ya totalmente desnudo, con su enorme pene erecto y chicoteando frente a él, les indicó que él sería el primero en disfrutar a esa portentosa hembra, los chicos que la sujetaban la tendieron de espaldas a la cama y sujetaron sus brazos y piernas mientras Fer se acomodaba sobre de ella, Fabi comenzó a forcejear pidiéndoles que por favor no le hicieran nada, gritaba que por favor la dejaran ir, que pensaran en sus mamacitas, que la dejaran irse y no le diría a nadie; pero obviamente eso no los amilanó y Fer le introdujo el pene de un solo empujón hasta el fondo. Ella gritó al sentir la introducción con un aparente dolor pero en realidad tratando de ocultar su gozo. El comenzó a moverse metiendo y sacando su enorme verga produciendo un ruido de succión muy excitante para Fabi quien gritaba como si la estuvieran matando pero esos gritos en realidad eran de placer. Fer era una máquina sexual, ya llevaba como cinco minutos follándola cuando les indicó que debían cambiarla de posición, los chicos le dieron la vuelta y la acomodaron en cuatro. Fer volvió a penetrarla y Fabi siguió gritando en cada embestida hasta que sintió que era inevitable su orgasmo, y para ocultarlo comenzó a gritar muy fuerte: ¡Noooo! ¡Déjenme! ¡Por favor! ¡Tengo esposo! ¡Fuchi! ¡Guácalaaa!

Y su cuerpo comenzó a convulsionar debido al placer que sentía, al mismo tiempo Fer sintió que la vagina de ella se contraía una y otra vez revelándole un mundo de placer completamente desconocido. Al momento de eyacular dentro de ella vio que pasaban lucecitas frente a sus ojos y su cuerpo igual se convulsionaba de manera involuntaria, con cada contracción liberaba un chorro de semen durante un lapso que se le antojó eterno, hasta sentir que estaba vacio y era imposible que le quedara una sola gota más de semen, extrajo su miembro y observó como la vulva de Fabi chorreaba los jugos del placer de ambos.




Los chicos la volvieron a tumbar de espaldas y fueron tomando turnos para follarla por la boca, Fabi fingía estar rendida y no forcejeaba cuando le metían sus vergas en pobre cavidad oral y le golpeaban el rostro dejándola en poco tiempo con la cara llena de líquido viscoso, luego fueron penetrándola por turnos y aunque ninguno resistió demasiado y se fueron viniendo dentro de ella en poco tiempo cada uno, de todas formas fue bastante placentero para ella, ya que entre los cinco le completaron dos orgasmos deliciosos que igual disfrazó gritándoles que la dejaran ir, cuando terminó el último aparentemente Fer ya había tomado su segundo aire ya que nuevamente tenía el pene en completa erección y dispuesto para volverla a follar. Se tendió de espaldas a su lado sobre la cama y les indicó a los chicos que la colocaran sobre él y sobre su verga. Sus amigos obedecieron y la empalaron sobre su miembro, a pesar de todas las vergas que ya había recibido Fabi fue delicioso recibir de nuevo ese enorme falo que comenzó a moverse dentro y fuera de ella de una manera deliciosa. Ella sin poder evitarlo comenzó a moverse también para incrementar su placer hasta que volvió a venirse, ya por cuarta vez en el día. Pero Fer aún seguía duro, y continuaba moviéndose lo que incrementó el tiempo de su orgasmo haciéndola sentir un placer increíble. Al no poder más se derrumbó como desmayada, lo que Fer aprovechó para decirles a los chicos que la tendieran boca abajo. Sin resistencia de ella y sin que la tuvieran que sostener, la penetro por el culo que él sintió apretadito y riquísimo, metiendo y sacando su verga hasta que no pudo más y se vino nuevamente adentro de ella. Fabi estaba extasiada, había sido una de las mejores sesiones de sexo que había tenido.



Fer le dijo que podía vestirse e irse sin problema y los seis se salieron de la habitación dejándola sola. Fabi pensó que deseaba dormir una siesta pero pensó que no sería muy prudente ya que no sabía exactamente las intenciones de sus violadores. Como pudo se vistió; excepto por su tanga que no sabía donde había quedado. Salió del cuarto y vio que Fer se encontraba sentado en el sillón terminando el vino que se había servido. Le indicó que se acercara que tenía que decirle algo. Fabi se acercó cautelosamente y le preguntó qué quería. Fer le dijo que en esa parte de la estancia había una cámara de seguridad que había filmado todo desde que llegaron hasta que ambos se fueron a la habitación, le dijo que había registrado su bolso y tenía su dirección y sus datos personales, que si lo denunciaba, él le enviaría el video y las fotos que tomó a su esposo para que supiera la clase de zorra con la que estaba casado. Ya que en el video solo se vería que ambos se besaron en la estancia y se fueron juntos al cuarto sería imposible alegarle que la violaron. Aunque pudiera probar lo demás que pasó, ella debía decidir si arruinar su matrimonio valía la pena por ello. Además debería volver a su departamento las veces que le mandara o si no igual su esposo se enteraría. Le dijo que era la zorra más sabrosa que hubiera probado en su vida y que deseaba volverla a tener más veces hasta que se cansara. Pero que ahora quería tenerla él solo y ya luego vería si la volvía a compartir con sus amigos.
Fabi no protestó, solo bajó la mirada y dijo que estaba bien, fingiendo una tristeza que no sentía. Fer le dijo que por ser buena zorrita él se iba a comportar galante, que le había pedido un UBER y que estaba por llegar, que lo tomara frente a su casa y esperara sus mensajes.
Fabi llegó a su casa completamente agotada pero feliz, tomó un baño y luego se quedó dormida por varias horas. Al despertar bajó a la cocina y se sirvió de cenar. Cuando estaba cenando llegó Alex, quien la observó un momento, sonrió y se dio la vuelta, Regresó con dos copas y una botella de vino que depositó en la mesita de la sala y mientras Fabi tomaba asiento, el sirvió ambas copas y procedió a desabrochar su pantalón mientras Fabi comenzaba a relatarle su aventura...















15.- Fer

Hola amigos: Ya estamos de regreso con nuestras aventuras, hemos tenido intensas actividades que les queremos contar, esperamos no volver...