lunes, 4 de diciembre de 2017

11.- Mark

Hola amigos. Estamos de regreso después de un tiempo en el que tuvimos que pensar en varias cosas acerca de nuestra vida.Esperamos les gusten los relatos que vienen, ya que los hacemos con mucho cariño para ustedes y con mucha excitación.

Fabi y Álex




Fabi había alcanzado los cuarenta y un años pero seguía siendo la mujer más despampanante de toda la comunidad del pequeño fraccionamiento donde vivían ahora. De padre veracruzano y madre hidalguense, enloquecía a cualquier hombre que se cruzase en su camino, con su metro cincuenta de estatura, su cabello castaño oscuro que clareaba con la luz del sol y que caía sobre sus hombros en una melena que se alborotaba al viento. Sus ojos son grandes y pícaros, color miel, felinos y tan exóticos, y aquellas cejas que dibujaban un arco fino y perfecto sobre los mismos en un rostro precioso, con una nariz hermosa y unos labios pequeños en forma de corazón,  que dan en conjunto un aire de inocencia a su rostro que la hace aún más deseable.
Tiene cuarenta y un años pero aparenta diez menos. Diario se ejercita durante dos horas, por lo que decir que es escultural realmente es quedarse corto. Ella es más, una Diosa.
Una real hembra, buena como ella sola, con unos grandes pechos con puntiagudos pezones y areolas perfectas y redondas como un pequeño anillo alrededor de éstos.
Poseía asimismo unas protuberantes y hermosas nalgas; el sueño de cualquier hombre. Era difícil encontrar en su cuerpo un gramo de grasa, su trasero era redondo y firme como de granito y con la textura del terciopelo, sus muslos redondeados y cálidos, con la firmeza del mármol, sus piernas pequeñas y suaves, su vientre plano como una tabla y en su curvada cadera no podía ponerse el sol.
Además es una mujer liberal, le encanta tener amantes, y tener sexo todos los días con hombres diferentes, a pesar de amar tanto a su esposo Álex, el cual es un buen mozo de cuarenta y cuatro años; de cuerpo atlético, que mantiene corriendo ocho kilómetros diarios y con ejercicios de piso aprendidos de joven cuando practicó gimnasia olímpica.


El mismo Álex la animaba a tener sexo con otros hombres, pues le encanta el papel de cornudo y masturbarse mientras Fabi le cuenta sus aventuras, para terminar viniéndose en la boca de Fabi o sobre sus pechos. Así son muy felices como cornudo y diosa.


Fabi odiaba que Álex tuviera que irse a los famosos congresos, el quedarse sola en casa le aburría muchísimo. Antes al menos se podía ir al club y buscar algún single con quien entretenerse, pero desde que lo cerraron le resultaba muy complicado conseguir algún macho, el fraccionamiento donde vivían era pequeño y la mayoría de los vecinos eran mayores, y ninguno lo suficientemente guapo como para emocionarse.


Además no podía salir siquiera a un café con amigas porque Alex le dijo el domingo al irse que iban a ir unos trabajadores a hacer arreglos en el solarium del jardín, que por favor supervisara su trabajo. Fabi se sentía fastidiada pero esperaba que al irse los trabajadores tuviera oportunidad de hacer algún plan.


Tocaron a la puerta y Fabi fue a abrir, al hacerlo se quedó muda, con la boca ligeramente abierta. El tipo que llegaba a realizar las reparaciones era un negro de casi dos metros de alto, muy musculoso y bajo la mirada entrenada de Fabi su entrepierna lucía espectacular, aparentemente muy bien dotado. Fabi le permitió el paso y le indicó el camino al solarium en la parte trasera de la casa, donde había además un jardín y una piscina. El enorme tipo le extendió la mano y la saludó diciéndole que podía llamarlo Mark, Fabi tartamudeando le dijo que podía llamarla Fabi y le avisara si necesitaba algo. Mark le sonrió y se dirigió al solarium cargando su mochila de herramienta. A Fabi se le hizo agua la boca al observar semejante ejemplar masculino, inmediatamente se imaginó lo que sería ser cogida por semejante garañon. Decidió que lo tendría muy pronto entre sus piernas.


Fabi entró al solarium y le llevaba a Mark una bebida con hielo, hacía bastante calor y el enorme negro deteniendo momentáneamente su trabajo se lo agradeció, la miró con admiración ya que ella llevaba puesto un bikini blanco muy pequeño que era semi  transparente, y una toalla en la mano. Fabi le dijo que mientras él trabajaba ella estaría en la piscina por lo que se le llegara a ofrecer, él le respondió que así lo haría que muchas gracias. Ella se dió la vuelta permitiendo que el tipo se deleitara observando ese trasero monumental que ella sabía mover al caminar.
Fabi se recostó en uno de los sillones junto a la alberca y comenzó a untarse bloqueador, incluso se levantó un momento la parte superior del bikini dejando apreciar sus fabulosos encantos mientras se untaba, aparentemente sin ser consciente de que desde donde se encontraba Mark en el solarium se podía observar perfectamente el exterior, aunque desde afuera no se veía hacia adentro. Por lo que Mark pudo apreciar perfectamente esas joyas de la naturaleza que portaba Fabi en el pecho, ella siguió untándose el bloqueador en sus hermosas piernas y ahora se retiró la parte inferior del bikini dejando su vulva perfectamente depilada a la vista de Mark que no perdía detalle y se preguntaba si esa bella rubia estaría tratando de incitarlo o si sólo era muy ingenua. Mark decidió apurarse en su trabajo y luego acercarse a la dama para ver si podía admirarla mejor. Fabi se acostó boca abajo para tomar el sol ya que era una de las actividades que más disfrutaba de su rutina diaria, eso le permitía a Mark una vista impresionante de su anatomía sin que aparentemente ella se diera cuenta.
Al cabo de un rato Mark salió del solarium y se acercó hacia donde estaba acostada Fabi, ella parecía dormida y él aprovechó para admirar de cerca ese impresionante trasero, esas nalgas como de mármol, esas piernas hermosísimas que lo ponían tan caliente. Desde que llegó el pobre negro se había sentido atraído por la escultural mujer, no sabía realmente cómo interpretar el que ella estuviera allí ante sus ojos acostada boca abajo y solo cubierta con la tanga del bikini, ya que la parte del sujetador se encontraba en el suelo, a un lado del sillón de alberca, aparentemente ella se lo quitó para poder asolearse mejor.

Mark sentía que su pene casi le dolía por la enorme excitación que le provocaba esa bellísima señora. Él nunca había tenido sexo con una mujer rubia y sentía un morboso deseo que se apoderaba de sus sentidos. Además ella parecía incitarlo aunque no estaba seguro, no se decidía a arriesgarse, pero le gustaban tanto esas nalgas que no supo cómo, pero cuando se dio cuenta ya había estirado una mano para tocarlas, su tacto era muy suave y firme, y Fabi no se movió a pesar de que él pasó su mano por la parte posterior de su muslo en dirección a sus nalgas, Mark acarició ese monumental trasero y hasta la cintura y regresó la mano hacia abajo. Aparentemente Fabi estaba muy dormida ya que no reaccionó en absoluto. Él se sintió más confiado y volvió a meter la mano pero ahora enmedio de las piernas de ella, siguiendo hasta tocar su vulva por encima del bikini, dejó ahí la mano quieta unos momentos y como no parecía haber reacción inició un movimiento de los dedos sobre los labios carnosos de la vulva de Fabi que se transparentaban a través de la delgada tela. Fabi entonces gimió un poco, pero parecía ser un sonido provocado por el placer, eso le hizo sentirse aún más audaz a Mark que decidió jugar el todo por el todo, deshizo los nudos laterales que sostenían al bikini y retiró con cuidado la parte posterior hacia abajo, dejando al descubierto los fabulosos labios vaginales que parecían fluir delante de sus ojos. Introdujo la punta de su dedo con cuidado y verificó que estaba muy húmeda, poco a poco fue introduciendo su dedo lo más que pudo y con la punta acariciaba por dentro a Fabi provocando un nuevo gemido más largo que el anterior, Mark no estaba seguro pero ella debería tener un sueño muy pesado para no despertar con eso, por lo que extrajo su enorme pene de sus pantalones que parecían reventar, se quitó la camisa y sus pantalones junto con los calzoncillos quedando totalmente desnudo al lado de esa real hembra. Con cuidado se acomodó sobre ella y con la mano guió el enorme y venudo garrote hacia la vagina de Fabi, introdujo suavemente el glande y removió hasta sentirse igualmente húmedo antes de continuar. Su pene era muy largo incluso más largo que el de Alex, y lo fue introduciendo muy lentamente, de repente se retiraba un poco y luego continuaba su avance, cada vez que hacía eso Fabi gemía un poco más fuerte. Sin embargo el afortunado negro estaba ya tan caliente que no hubiera podido sacárselo por nada del mundo. Además la vagina de Fabi se estrechaba alrededor del invasor haciéndolo sentir un éxtasis al tener su pene en ese apretadísimo túnel. Cuando ya no podía meter más inició un movimiento adentro y afuera que aumentó el nivel de los gemidos de esa hembra caliente que tenía ensartada. Sólo esperaba que no despertara porque si no probablemente se asustaría tanto que lo correría y él estaba muy contento de tener su instrumento metido en esa húmeda y muy caliente cueva. No pudo soportar más y se vino en un torrente inagotable, no recordaba haber nunca liberado la cantidad de semen que dejó dentro de Fabi. Al sacarle su negra verga, se dio cuenta de que era imposible que ella no se diera cuenta de lo que le había hecho, ya que escurría por sus piernas y por el sillón dejando un charco en el piso. Asustado se volvió a vestir y colocó de nuevo el bikini de Fabi como estaba, mientras pensaba en que había hecho una cosa muy estúpida, cuando ella despertara se daría cuenta y lo correrían, a lo mejor hasta lo metería en la cárcel por violación. Se regresó al solarium esperando con miedo el momento en que ella despertara.
Desde su posición observó que Fabi se levantaba después de un rato y aparentemente sin notar nada raro se iba caminando hacia la casa, era impresionante el espectáculo ya que no se había puesto el sujetador del bikini, sino que caminó topless hacia la vivienda.
Al llegar la tarde, Mark se acercó a la casa y la encontró ya vestida, sentada en la cocina leyendo una revista, le dijo que regresaría al otro día a terminar el trabajo porque no le alcanzó el tiempo. Fabi le dijo que estaba bien que no se preocupara que lo esperaba al otro día para que siguiera con su trabajo.
A Mark le pareció que ella escondía una sonrisa. ¿Sería que se había dado cuenta de todo?
Aunque a Mark le hubiera bastado un día para terminar el trabajo estuvo yendo toda la semana. El ritual era igual todos los días, Fabi se acostaba a tomar el sol junto a la piscina y él iba y se la cogía, incluso el día anterior le había dado la vuelta y se la cogió por delante ya que tenía unas ganas tremendas de besar esos enormes y preciosos senos que había observado desde el primer día. Fabi permanecía exactamente igual dormida permitiendo que se la cogiera hasta llenarla de su semen y dejarla escurriendo.
Ese día sería especial, pensó. Ya que al otro día llegaría su esposo y no podría seguirla disfrutando, había estado meditando y decidió que hoy la penetraria por el ano. Le pareció que era muy adecuado como despedida.
Al llegar Fabi le abrió la puerta y lo acompañó como los otros días al jardín, Mark se sorprendió ya que junto a la piscina trabajaba otro joven, un muchacho bronceado por el trabajo y con unos shorts puestos que limpiaba la superficie del agua con una red muy larga. Fabi lo acompañó hasta el solarium y le dijo que iba a tomar un baño que si necesitaba algo le avisara. Mark se sintió desilusionado ya que se había creado muchas expectativas. Como en realidad el trabajo ya estaba terminado decidió mejor irse, tomó su mochila y entró a la casa buscando a Fabi para decirle que ya se retiraba, no la vio en la cocina por lo que probablemente debido a su desilusión, sin pensar, entró a la recámara sin tocar. Al entrar quedó impactado, Fabi estaba completamente desnuda, de espaldas a él, aparentemente decidiendo que ropa ponerse. Mark se quedó extático en el umbral sin hacer ruido, Fabi seleccionó algunas prendas y comenzó a vestirse, Mark caminó de espaldas y salió de la comprometida situación, sin embargo se sentía morir por esa hembra, la deseaba con todas sus fuerzas. Estaba convencido de que ella había fingido estar dormida mientras él se la cogió toda la semana, pero, ¿y si no?







Siguió parado fuera de la habitación y Fabi no salía, venciendo su temor volvió a asomarse y la vio acostada en su cama aparentemente dormida. Mark casi saltó del gusto y entró a la recámara confiado, ya que durante los demás días Fabi al quedarse dormida ya no reaccionaba y él podía hacerle lo que quisiera. Se sentó en la cama junto a ella y le subió el vestidito que se había puesto dejando ver sus hermosas y esculpidas nalgas y una tanga rosa que las hacía resaltar fantásticas. Deslizó suavemente la tanga hacia abajo descubriendo su sexo, y separando las nalgas de Fabi llenó con su saliva la región del ano, estaba decidido a intentar esa vía ya que se imaginaba que sería fantástico hacérselo por ahí, primero metió la punta de su dedo probando la dilatación de ese orificio rosado que sintió dulcemente apretado, ocasionando un gemido por parte de Fabi. Mark se bajó los pantalones y extrajo su extraordinario pene, colocó el glande en ese maravilloso orificio de Fabi empujando poco a poco hasta que sintió que cedía a la presión y entraba la punta por fin. En ese momento en el espejo vio algo que lo aterró. el chico de la piscina estaba en la entrada del cuarto observándolo, no podía ser, estaba tan cerca de su objetivo…



El chico de los shorts parecía pasmado con la situación pero de repente sonrió y colocando su índice sobre sus labios indicándole silencio se acercó y observó a Fabi que parecía completamente dormida. El chico se deshizo del short y mostrando un muy erguido pene, lo acercó a la cara de Fabi que impasible continuaba dormida, lo colocó en sus labios y encontró el camino al interior de su boca. Los dos hombres continuaron cogiéndose a Fabi sin aparente reacción de ella, por el ano y por la boca, Mark sentía ganas de moverse rápida y profundamente pero tenía miedo de despertarla, por lo que continuó moviéndose suavemente aunque ya había introducido todo su enorme miembro. El chico limpia piscinas también se movía lentamente, de repente en su rostro se mostró el rictus característico del orgasmo y se vino completamente dentro de la boca de Fabi. Mark estaba sorprendido pero no tardó en venirse también en el culo de ella. La sensación de venirse dentro de tan estrecho orificio fue sublime, tardó varios minutos eyaculando, su pene tenía una dureza como de roca en cada contracción. Nunca había disfrutado tanto. El limpia piscinas le hizo una seña y ambos tomaron su ropa y salieron, únicamente volviendo a colocar su ropa a Fabi en posición normal.
Al encontrarse afuera y ambos vestidos, el chico limpiapiscinas que dijo llamarse Tony le contó a Mark que él iba cada viernes a limpiar la piscina y siempre era lo mismo, ella se dormía junto a la piscina o dentro de la casa y él se la cogía por donde quisiera. Mark le cuestionó si ella realmente estaría dormida quizás se encontraba fingiendo. Tony le dijo que no debía preocuparse, que mejor siguiera trabajando y disfrutara de esa hembra del cuerpazo tan impresionante cada vez que pudiera. ¿Para qué investigar?


Al caer la tarde Fabi salió a despedirlos, Tony le dijo que volvería el siguiente viernes, y Mark le dijo que aún no terminaba el trabajo que si le permitía continuar la siguiente semana, no le cobraría más pero le gustaba terminar bien el trabajo. Fabi le respondió que no había problema, para ella no era molestia ya que era preferible que la acompañaran ya que su esposo volvería a salir de viaje y se sentía más segura con Mark en casa ya que le parecía una persona muy amable. A Mark le brillaron los ojos al escuchar eso y se fue sonriendo muy contento prometiendo volver el lunes muy temprano.


El sábado Alex llegó en taxi desde el aeropuerto, entró a su casa y saludó a su esposa con un beso. Ella le tenía preparada una botella de Merlot abierta y la pantalla de televisión con escenas de la piscina muy interesantes...


15.- Fer

Hola amigos: Ya estamos de regreso con nuestras aventuras, hemos tenido intensas actividades que les queremos contar, esperamos no volver...